Tráfico de drogas

El tráfico de drogas es considerado como un delito que atenta contra la salud pública, encontrándose directamente relacionado con el cultivo, fabricación, tráfico, agilización e impulso, para el consumo de sustancias estupefacientes o de tipo psicotrópico. Está contemplado en el Código Penal estableciéndose sanciones de tipo penal y administrativo para aquellos casos que involucren posesión de drogas.

El tráfico de drogas incluye un conjunto de acciones que se consideran de modalidad básica y agravada.

Conductas contempladas en la modalidad básica

1. La ocupación del cultivo de drogas o su procesamiento, así como de cualquier tipo de sustancias químicas, nocivas para la salud.
2. El tráfico de drogas y cualquier sustancia psicotrópica.
3. La acción de promover bajo cualquier artificio, así como facilitar el consumo de drogas.
4. La posesión de drogas, destinada a los fines antes mencionados.

De allí que este delito es uno de los que se considera más amplios, pues abarca un gran número de conductas. Para ello mencionaremos algunos ejemplos, a fin de visualizar las diversas conductas que hacen incurrir en este delito.

• La acción de que procedas a vender drogas a un amigo, no solo se considera un delito, sino también el hecho de que se la regales, ya que estarías incitando a que tu amigo haga uso de la droga de forma habitual, promoviendo su consumo.
• Puedes incurrir en el delito llevando droga de un lado a otro, pero también lo es almacenándola en tu casa, mientras la comercializas o trasladas.

Cuando se hace referencia a drogas, se mencionan diversos tipos de sustancias, entre las cuales encontramos: drogas tóxicas, sustancias psicotrópicas y estupefacientes. Lo determinante, será definir el grado de daño que trae su consumo sobre la salud, clasificándose según este parámetro en dos grupos:

1. Drogas que provocan daños graves a la salud o también llamadas “drogas duras”, entre ellas están: morfina, heroína, cocaína, anfetaminas, ácido lisérgico (LSD) y las drogas de diseño como el éxtasis (MDMA).
2. Drogas cuyo daño a la salud no resulta ser tan grave, llamadas “drogas blandas”, como lo son: marihuana, hachís, tranxilium, trankimazín, codeisán y otros fármacos provenientes del opio.

Conductas contempladas en el tráfico de drogas en la modalidad agravada

En el delito de tráfico de drogas, se presentan ciertos casos donde la situación se puede agravar, lo que implica una penalización mayor, entre los cuales mencionamos a continuación:

• En caso de que quien comete el delito sea funcionario público, trabajador social o docente, donde actúa haciendo abuso de su posición o cargo, para cometer el delito.
• En caso de proveerle la droga a un menor de 18 años, personas con problemas mentales o quienes se encuentren en proceso de rehabilitación.
• Si el tráfico es de “notoria importancia”, lo que hace referencia a la cantidad que se posea de droga, lo que dependerá del tipo de sustancia que intervenga en el delito, existiendo una cantidad específica para cada una de ellas.
• En caso de que el traficante pertenezca a una red delictiva.
• En caso de ser involucrados menores de 18 años o personas con discapacidad, para traficar con este tipo de sustancia.

Posesión de droga para el autoconsumo

En caso de tener droga en tu poder, para ser implementada para tu uso particular, sin intención alguna de perpetrar con el tráfico, debes saber que no estás incurso en ningún tipo de delito. Para ello, lo primero por lo que optan los jueces que llevan dicha causa, será analizar la cantidad encontrada, a fin de establecer si es para consumo propio u otro fin.

Los expertos en el área, hacen un estudio detallado de las circunstancias e indicios pertinentes, que esclarezcan si dicha cantidad era para traficar con ella, y en caso de ser así, se estaría cometiendo un delito. Será importante si al momento del hallazgo se encuentra indumentaria para su cortado, preparación, peso, u otro proceso, que dé pie a entenderse que se está vendiendo la misma.

Generalmente, las drogas suelen ser conocidas con la denominación de sustancias controladas, por el hecho de que su uso y distribución están regidos por la ley. Su efecto puede traer consecuencias serias, sobre la salud física y mental de un individuo, siendo algunas de ellas el LSD y éxtasis, aunque algunas son consideradas de cierto modo legal, como las indicadas por récipes médicos.

En la legislación española, uno de los delitos considerado que atentan contra la salud pública, es el relacionado con drogas de carácter tóxico, sustancias psicotrópicas y estupefacientes. Este delito es regulado por el Código Penal, mediante la aplicación de penalización de prisión y multas, dependiendo del tipo de sustancia y cantidad que sea incautada.

Para el caso de quienes se encarguen del proceso de fabricación, traslado, distribución, comercialización, así como se halle en posesión de materia prima y equipos, que estén relacionados con la producción y fabricación de sustancias ilícitas, serán penalizados con prisión de 3 a 6 años, incurriendo en una multa administrativa.

De cometerse el delito de tráfico de estupefacientes, perteneciendo a una banda delictiva dedicada a este tipo de actividad, será castigado con prisión entre 9 y  12 años, con multa adicional. Esto se atribuye a que es un delito agravado, pudiendo ocasionarle daños graves a la salud, y para el caso de los jefes o encargados de la organización delictiva, las penalizaciones serán mayores.

Si la persona que cometiere el delito funge como persona jurídica, le será impuesta una pena que contempla una multa entre 2 a 5 años, y prisión entre 2 y 5 años. Adicionalmente, podrá ser inhabilitado de sus funciones, dependiendo de la cantidad y tipo de droga que esté involucrada en el delito.

La imposición de la penalización máxima, será aplicada de manera independiente, si el imputado hubiese incurrido en modalidad básica o agravada, en los casos siguientes:

• Si el delito fuera cometido por un funcionario público o docente, quien ocupara su cargo en ese momento, donde representa una falta grave, pues probablemente hizo uso de su oficio para perpetrar el hecho.
• Al momento de participar en otras organizaciones delictivas, que tengan relación con el delito de drogas.
• Al realizarse dicha actividad en establecimientos públicos.
• Al ser realizada tal acción en menores de edad o discapacitados.
• Si la cantidad hallada fuese considerada por el juez, como de notoria importancia.
• En caso de haber sido alterada, para ocasionar mayores daños a la salud.
• Al tener lugar en colegios, cárcel, centros de rehabilitación, etc., o en sus alrededores.

Del bien jurídico protegido en el delito de tráfico de drogas

El bien jurídico al que se otorga protección, en el caso de tráfico de drogas, es en esencia la salud pública, la cual es considerada con el principal derecho constitucional. Esto se debe a que, la acción de este tipo de sustancias ilícitas en el organismo, puede traer graves efectos y ocasionar lesiones a nivel psicológico y físico, atentando contra la humanidad.

En este sentido, hay que tomar en cuenta que el orden público está resguardado desde el punto de vista penal, de forma voluntaria o no, ya que el consumo de drogas produce ciertas modificaciones en la consciencia del individuo. Esta alteración generará conductas impropias, lo cual es rechazado totalmente desde el punto de vista moral y social.

Otro aspecto notorio en el tráfico de drogas, es que puede ocasionar daños irreparables de carácter social, donde familias enteras podrían generalizar el uso de este tipo de sustancias, provocando ciertas enfermedades mentales, debido a su uso prolongado. Así pues, se pondría en riesgo total el Sistema Nacional de Salud, creando una cadena de daños a generaciones enteras.